¡Sevilla! suelo fecundo
lleno de luz y grandeza,
¿qué diré de tu belleza,
que ya no haya dicho el mundo?
Nunca mi afecto profundo
pudo elevarte canciones;
más hoy que, en otras regiones,
de verte la dicha pierdo,
es para mí tu recuerdo
manantial de inspiraciones.
A Sevilla, poem by
Mercedes de Velilla